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Cómo encontrar el equilibrio entre pasión y trabajo sin caer en el Workaholismo

La pasión en el trabajo, un arma de doble filo. Qué puedes y debes controlar para no convertirte en Workaholic.

Realmente no sé cómo enfocar este artículo, porque creo que tengo muchos aspectos a comentar dentro de esta frase que está tan de moda de “pasión por tu trabajo” o “pasión por lo que haces”. Ante todo, la  verdad que me quedo con “pasión por lo que haces”, ya que la parte de la gracia en esta vida es saber dar lo mejor de ti, siempre.

En mi caso, la pasión por mi trabajo la descubrí a raíz de mis 2º prácticas de la universidad, mis primeras en eventos. Tuve la oportunidad de entrar en una gran agencia de comunicación, especializada en eventos del motor y deportivos como es RPM Sports (en aquel tiempo RPM Outsourcing). Fue una empresa que me permitió implicarme como un trabajador más y, al responder positivamente a esta implicación, incluso me dieron la oportunidad de viajar y trabajar la experiencia in situ de la producción en proyectos como El Dakar o la 2ª Edición de la Titan Desert.

Y fue en  esa 2ª Edición fue donde tuve “la revelación”. Pasó de todo, llegando incluso a tener que cancelar la salida uno de los días por “el diluvio universal” y teniendo que cambiar la ruta porque había zonas por las que no era posible el paso debido a las inundaciones. Bueno y qué decir de los horarios… ahí creo que también ves que o te gusta mucho o no compensa, ya que levantarte a las 5am y acostarte a partir de las 00h durante 1 semana… no es el mayor placer del mundo precisamente. Sin embargo yo lo disfruté como un niño saltando en un charco (por aquello de seguir con las lluvias ;P).

Así que para mí el dedicarte a lo que te apasiona significa que te compensen lo suficiente las partes positivas, y así soportar sin demasiado esfuerzo las negativas.

En mi opinión no se trata de una personalidad concreta, una expresión exagerada de las emociones ni mucho menos (que los que me conocéis sabéis que no soy fan de ningún tipo de exageración). Se trata de actitud, de implicación, de hacerlo lo mejor que sabes, aprovechando tus habilidades y conocimientos en beneficio del proyecto. 

Y si realmente logras dedicarte a lo que te apasiona, en el fondo da igual la profesión porque vale para todas, si te esfuerzas y encima le pones esa pasión, el resultado es lo que marca la diferencia.

Y en mi caso, en eventos, la cara del cliente y asistentes cuando ven la realidad … Esa cara de sorpresa, satisfacción, orgullo de pertenencia a la marca… NO TIENE PRECIO (Así entre nosotros, realmente es muy satisfactorio llegar a ver sonrisas en caras que creías paralizadas, y no con un mood agradable precisamente ;P).

Porque en esta profesión, cuando realmente te implicas de esta manera tu mayor meta es que la gente disfrute con el evento. Y, tanto para bien como para mal, es muy fácil saber si realmente ha sido un éxito o no, basta con observar las caras de los asistentes.

Pero ojo, porque esta pasión realmente es un arma de doble filo, es muy fácil perderte en el mundo del proyecto y que se te pasen las horas sin enterarte, por lo que acabas pringando de lo lindo. En eventos siempre hay algo pendiente, pero llega una hora en la que tienes que cerrar. Por 2 motivos principales:

  • Salud mental: no puedes vivir para el trabajo, no puedes centrar “tu disfrute” en una sola actividad (cuanto más puedas diversificar más salvavidas tendrás el día que falle una de las opciones) 
  • Productividad: este no solo disminuye ese día cuando llevas 10 horas trabajando activamente, sino que según lo que te pases de la hora, probablemente ni al día siguiente no seas precisamente tu mejor versión, tanto el cuerpo como la mente necesitan desconectar.

Así que mi consejo, y en relación a ese “disfrute”, el truco está en darlo todo, pero siempre, tanto en una cena con amigxs como en el trabajo. Compensa esfuerzos o lo que es lo mismo “Work hard, play hard” ;P 

Si eres de salir a la montaña, búscate ese tiempo y resérvatelo como tarea, pero sobre todo, ya que empleas ese tiempo… disfrútalo y permite que la naturaleza te haga desconectar.

Si eres de salir a bailar, sal y baila como si fuese el último día en el que pudieses salir.

Si eres de pasar tiempo con tu familia y/o amigxs, planea algo diferente y hacedlo juntos, recuerda que la clave está en pasar tiempo de calidad, de disfrutar de la compañía.

Y yo bueno, pues debido a mi pasión y estado fiscal soy casi workaholic, pero por suerte, después de un año estoy logrando fijarme casi un horario de entrada y salida, que no de agenda, porque el día que pueda mantener tal cual lo que planifico de un día para otro creo que será el día que me habrá dado un aire y he hecho cambio de profesión ;P

¿Tú qué piensas sobre la importancia de la pasión en el trabajo?¿Crees también que se trata de un arma de doble filo?¿Te gustaría compartirnos tu experiencia?

P. D. Aclarar que no es que sea de “consejos vendo que para mi no tengo” sino que es más fácil decirlo que hacerlo, como pasa siempre. Así que se agradece cualquier tipo de recomendación o truco para seguir manteniendo a raya a la versión Workaholic del autónomo.

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